Para muchos, las épocas navideñas están llenas de complejidades. Por ejemplo, la presión de tener una experiencia mágica, el estrés de la familia, las aflicciones y las enfermedades físicas, todo esto interfiere con las expectativas navideñas, y eso es lo que hace que esta época del año sea complicada.
Sin embargo, con las preparaciones adecuadas, las navidades pueden ser un periodo de descanso y renovación, incluso para aquellos que están atravesando un momento difícil. A continuación, te presento siete maneras en la que puedes aliviar el dolor si tienes unas navidades más conscientes.
No te apresures
Muchas personas tienen una percepción paradójica de las navidades. Creen que si adelantan el trabajo, tendrán más tiempo para descansar y celebrar. Por el contrario, al igual que las vacaciones escolares, las navidades terminan en un abrir y cerrar de ojos, y por lo general traen consigo más trabajo que descanso.
Así que el primer paso para tener unas navidades conscientes es tomarse las cosas con calma, física y mentalmente. Si te tomas las cosas con calma, podrás prevenir el cansancio físico y mental, lo que te ayudará a controlar mejor cualquier dolor que estés experimentando.
Analiza tus expectativas
Las épocas navideñas son un periodo de muchas expectativas. Esta época se caracteriza por provocar una sensación de urgencia y anticipación. Sin embargo, es difícil relajarse y disfrutar las festividades cuando sientes que estás obligado a pasar un buen rato.
No hay nada de malo en imaginar cómo será todo, pero debes asegurarte de que esas expectativas sean reales, de lo contrario terminarás decepcionado, porque las cosas que tenías en mente no se cumplieron. Así pues, siéntate un momento y analiza esas expectativas para ver si se pueden cumplir o no.
Observa la magia a tu alrededor
La percepción de tu vida afectará la forma en la que vives la vida. Así que trata de agregarle más romanticismo a tu vida, esto te ayudará a redefinir tus experiencias con más positivismo, felicidad y esperanza. Ya que para apreciar por completo la vida, tienes que estar presente con el cuerpo y el entorno.
Las expectativas realistas no tienen que ser aburridas, puesto que el estar presente en el momento puede reducir el dolor físico y mental, y esto como resultado dará equilibrio a ese mundo interior, lo que te recordará de todas las cosas hermosas que te rodean.
No pasa nada si estás pasando por un momento difícil, sobre todo si sufres de algún dolor físico o mental, pero no es saludable que permanezcas en ese estado para siempre. Trata de observar y apreciar el presente de modo que puedas desarrollar hábitos mentales sanos que te ayuden a superar esos momentos difíciles.
Enfócate en el presente
Existen muchas maneras de enfocarse en el presente, entre ellas están mantener un diario, expresar gratitud o hacer ejercicios de respiración. Es más, algunos de los métodos más valiosos para estar presente se pueden integrar en las actividades del día a día.
Al principio será difícil tratar de mantenerse en el presente, pero con el tiempo te ayudará a lidiar con las emociones difíciles y a encontrar reposo. Recuerda que huir del dolor no es la solución.
Veamos tres métodos concretos de bajar el ritmo y enfocarse en el presente durante las navidades:
Come con moderación
En las navidades, por lo general, se celebra con comida tradicional, en esto va incluido las cenas en familia y cualquier otra cosita. Por desgracia, a menudo, después de darte un festín, terminas sintiéndote culpable y avergonzado. Hay que mencionar que, además, muchos tipos de dolores surgen a partir de la inflamación corporal, y una mala dieta puede incrementar los niveles de inflamación.
Para lidiar con el dolor durante las navidades, procura estar presente por completo a la hora de comer. Elimina las distracciones como las pantallas, los libros y el trabajo, y solo enfócate en comer y en estar presente con los demás durante las comidas. Si pones toda la atención en la comida, la disfrutarás más; aparte que te ayudará a regular lo que ingieres.
Compra con intención
Si bien las navidades no se tratan de obsequiar regalos, en ocasiones pareciera que fuera así. Obsequiar regalos debería ser una parte agradable de esta época del año, y no una obligación estresante que suponga un esfuerzo económico. Planea con antelación y escoge unos regalos de bajo costo para reducir los niveles de estrés, ya que este solo empeora los malestares físicos y mentales.
Es más fácil ir de compras cuando se hace de poco a poco junto a alguien que te apoye a ti y a tus decisiones. Si reduces las expectativas cuando vayas de compras, disfrutarás más de las fiestas y tendrás un espíritu más relajado que no se verá afectado por el estrés de los regalos.
Escucha con atención
Otra forma en la que puedes estar presente en las navidades es escuchando con atención. Durante los momentos más ajetreados del año, es muy fácil ignorar a los demás y solo pensar en las cosas que tienes por hacer o en los problemas personales. En este periodo de fiestas, primero anota todo lo que tengas que anotar (listas, pensamientos) y luego enfoca toda tu atención en las personas a tu alrededor.
Pero ojo, escuchar con atención no significa que tengas que dar consejos a los demás o que permitas que te agobien con su dolor. Saber escuchar de forma activa y saludable crea intimidad, espacio para la confianza y demuestra el amor profundo que se tiene por los demás.
Repite lo que escuchas para estar seguro de que entiendes, pero también haz preguntas que demuestren tu interés. Escuchar con atención es el mejor método para estar presente en el momento; participa en la comunidad y combate la soledad.
Dedícale más tiempo a la paz
La paz mental no llega como por arte de magia durante las navidades. En cambio, se trata de algo que tienes que cultivar con las decisiones personales, más aún cuando estás pasando por momentos difíciles. Y debido a que las temporadas decembrinas son tan atareadas, resulta muy fácil abandonar el cuidado personal y perder todo rastro de paz.
Algo importante que hay que entender para tener paz es que solo tú eres responsable de tu salud y de tus emociones y que no puedes controlar los sentimientos de los demás o la forma en la que reaccionan. Es esencial que le dediques tiempo al cuidado personal a fin de que puedas cultivar una sensación de paz interior.
Dale prioridad a cuidado corporal
Si descuidas el cuidado corporal, solo estarás empeorando cada dolor que sientas. Es imprescindible que mantengas buenos hábitos alimenticios, que tengas un horario fijo para dormir, que bebas muchas y que tengas una rutina de ejercicios durante este periodo de fiestas. No es obligatorio que tu itinerario difiera mucho del que has tenido por el transcurso del año, pero no es recomendable que dejes las rutinas de cuidado para cuando estés menos ocupado.
El cuidado corporal reduce y previene los malestares, y también tiene un impacto positivo en la salud mental y emocional. En invierno, muchas personas sufren de depresión, en parte por el clima oscuro y la reducción de la actividad física. Para esto la vitamina D, la terapia de luz y hablar con un terapeuta te pueden ayudar a combatir esa depresión.
Dedicale tiempo al bienestar emocional
El cuidado del cuerpo no es lo único de lo que debes estar pendiente, de igual manera, es importante que cuides de tu alma. Encuentra un equilibrio entre los momentos personales y los momentos para tu familia y amigos, y asegúrate de que, entre todo esto, tengas tiempo para mantener un diario, escuchar música, o cualquier otra actividad que te ayude a relajarte.
Escúchate a ti mismo y concédete el espacio necesario para procesar aquellas emociones y pensamientos que te molesten. No te obligues a ser “feliz” en esta época. Por el contrario, no hay problema con que tengas momentos de felicidad aunque estés en medio del dolor. Si te sientes solo, no dudes en acercarte y pasar más tiempo con aquellos más cercanos a ti.
Una de las mejores maneras de cultivar la paz es ser amable consigo mismo, pero hay que recordar que la amabilidad no es lo mismo que la permisividad. Las emociones necesitan de espacio para moverse, es por esto que no es saludable mantener sentimientos negativos. El procesamiento de las emociones se vuelve más fácil cuando estás al tanto de ellas, en lugar de reaccionar a ellas.
Unas navidades agridulces
Si estás en temporada de dolores, entonces quizás no tengas ganas de celebrar las navidades. No obstante, aún puedes encontrar alegría en esta época si te involucras en cada momento y aprecias las cosas buenas que están presente en tu vida.
Para finalizar, sigue estas recomendaciones para tomarte las cosas con calma, enfocarte en el presente y dedicarle más tiempo a la paz durante esta temporada. La consciencia plena te puede ayudar a tratar el dolor y a hacer que este año sea tuyo, así que sé amable contigo mismo y no pierdas la esperanza de lo que pueden traer estas temporadas.
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