No soy una persona de naturaleza gregaria, sino más bien, una amante de la soledad. Puedo pensar mejor cuando estoy sola, prefiero caminar sola. De esta manera, me doy cuenta de los detalles increíbles de la naturaleza y experimento lo imprevisto, como la mariposa fritillary del cabo que se paró en mi hombro esta mañana.
Mi primer libro se formó mientras caminaba. Cuando regresé a mi estudio, apunté las ideas al divagar en ponerlas en palabras, párrafos y capítulos.
Ayer, un colibrí anna pasó de prisa, y habría escapado mi atención si yo hubiera estado hablando con alguien. No es que un colibrí pueda cambiar mi vida, sino que al reconocer su presencia única y detenerme a admirarlo, rindo homenaje al mundo natural, del que formo una pequeñísima parte.
Durante un paseo en el bosque, decidí concentrarme en las formas y diseños de las hojas. Rodeada de hojas, estaba atrapada por su variedad infinita, sus formas, colores y texturas. De repente recordé lo que Stan, una vez mientras estaba removiendo las hierbas, dijo que las plantas constituyen el 85% de lo que está vivo en el planeta. No me canso de ese 85%. A través de todas las dificultades de esta época y de mi edad, el espacio de mi jardín nos cultiva a ambos, a la fauna y a mi.
Mientras contemplo un hoja, ya sea que este arrugada, manchada o llena de vida, me da esperanza; como una especie de certeza de que hay más en la vida que los tipos de interés, los precios de la gasolina, las influencias en la bolsa de valores o el dispositivo tecnológico más moderno. Que hay espacio para ti y para mi, para todas las variedades de vida, grande o pequeña, vista o por verse.
A si es que, ¿como estaría nuestro planeta sin las hojas terrestres y acuáticas? Totalmente desprovisto de vida.
Las hojas y la fotosíntesis
Las hojas son indispensables para un proceso llamado fotosíntesis, es un proceso que es fundamental para la vida en el planeta, por el que se procesa oxígeno a partir de dióxido de carbono, que nos permite respirar. Nuestra atmósfera es 21% de oxígeno. Esto es bueno para la humanidad, pero las plantas no respiran como nosotros. Ellas no respiran. Ellas transpiran a través de sus hojas.
Aquí sigue algo acerca de como funciona esto:
Las plantas se construyen a si mismas de abajo hacia arriba. Dentro del sistema de las raíces de una planta existen unas series de células, cada una de ellas apiladas sobre otras, para formar una especie de gotero. El gotero absorbe el líquido, mediante una tensión superficial. Esta es básicamente la forma en que las plantas toman la humedad del suelo; y, a través de la transpiración, las plantas reciclan el gas de dióxido de carbono que se encuentra presente en el suelo y en el aire.
Los gases pasan a través del cuerpo de la planta, y para cuando alcanzan la puntita de las hojas, ya está modificado por la fotosíntesis, este es un proceso que ocurre en las hojas de la planta. Este requiere de la clorofila y de la energía luminosa. Durante la fotosíntesis, la clorofila en las hojas ayuda a convertir el dióxido de carbono y agua en oxígeno y glucosa.
Entonces el oxígeno pasa a través de los estomas de la hoja. Los "estomas" son portales en las hojas de las plantas que controlan el intercambio de gases. ¿Cuantas estomas existen en una hoja promedio? Alrededor de 300 por milímetro. Son demasiadas estomas. Cada una es probablemente una centésima parte de la anchura de un cabello, y literalmente hay millones a lo largo de los bordes de cada hoja.
¡Estas pequeñas estomas han modificado efectivamente la atmósfera del planeta en los últimos 500 millones de años! La verdad es que antes de la época Devónica, aproximadamente hace 400 millones de años, el planeta estaba cubierto en gran parte por dióxido de carbono. No hubiéramos podido respirar si no fuera por las plantas al crear nuestra atmósfera actual.
Además de hacer todo eso, las hojas son infinitamente hermosas, el tema de pinturas grandiosas que admiro, sobre todo los paisajistas que se centran en una flor o una hoja para no perderme en una neblina de vegetación. Georgia O´Keeffe fue una experta al re imaginar el mundo de las plants, al llevarnos al primer plano de sus grandes lienzos.
A un paseo en el bosque es a donde voy para perderme, y es a donde voy cuando me quiero encontrar. Solo tengo que mirar, reflexionar, admirar y respirar el aire que nos dan las hojas.
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imagen 1 👀 Mabel Amber, who will one day de Pixabay; image 2 Douglas-fir needle stomata Oregon State University, CC BY-SA 2.0, via Wikimedia Commons
