La edad adulta es para aprender a ser los padres de familia de uno mismo. Si permanecemos solteros lo suficiente, también es para aprender a ser nuestra propia pareja. Y si no podemos pagar un terapeuta, puede que también tengamos que volvernos uno de estos para nosotros mismos.
Los tres me aplican: No estoy cerca de mis padres, he estado soltera la mayor parte de mi vida, y raras veces he podido pagar terapia en intervalos de no más de algunos meses
Por suerte, he podido utilizar mi creatividad para esencialmente hacer un facsímil razonable de las cosas que faltan en mi vida. La herramienta que utilizo es mi escritura, y el ejercicio de escritura más útil con el que me he topado es tener una conversación imaginaria con mi terapeuta interior (lo que esencialmente es igual a conversar con mi intuición, pero después habrá más sobre esto)
Las cinco fases del ejercicio de escritura
Si quieres intentar este ejercicio para ti, aquí están los cinco pasos que hay que seguir:
- Saca una libreta y una pluma y déjalas a un lado por 45 minutos para escribir. Escribe la fecha en la parte superior de la página. Decide que nombre le vas a poner a tu terapeuta interior. Normalmente al mío le llamo "Terapeuta." Hace poco, utilicé las iniciales "LT": "Life Therapist - terapeuta de la vida"
- Escribe el nombre o las iniciales que has escogido en el lado izquierdo de la fila superior de la página seguido de dos puntos, y escribe algo parecido a esto "¿Qué te ha pasado últimamente?" o "¿Qué tienes en mente hoy?" Utiliza cualquier frase que te imagínese que un terapeuta de verdad utilizaría para iniciar una sesión.
- En el lado izquierdo de la siguiente fila, escribe una de las siguientes opciones: tu nombre de pila, tus iniciales o simplemente "Yo." Entonces, empieza a escribir tus preocupaciones como las expresarías en el consultorio del terapista. Puede ser que escribas "No puedo dejar de preocuparme por dinero" o "Ahorita me siento muy abrumada."
- Continúa escribiendo de ida y vuelta entre tu y tu terapista interior, como si estuvieras escribiendo el diálogo de un libreto. Concentrate en darte valor y en validar tu experiencia, necesidades y sentimientos. Intenta darte consejo y sugerencias desde un punto de vista objetivo, lo cual es, a fin de cuentas, el beneficio de este ejercicio. Ver las cosas desde otra perspectiva puede abrir tus ojos a medios y posibilidades que no habías visto.
- Termina la conversación con algo que requiera un plan de acción, aún si es sólo una cosa que te comprometas a hacer. Tal vez tu terapista interior te sugiera que te levantes una hora más temprano para que termines varias cosas antes de irte al trabajo. Tal vez te sugiera hacer este ejercicio de escritura otra vez después de unos días para que continúes desahogando y solucionando las cosas. Tal vez el único consejo que tenga para ti es que dejes de ser muy dura contigo misma - es algo que me han dicho todos los terapeutas que he tenido. No hay razón para que no me lo diga yo también.
Una muestra de la conversación con mi terapeuta interior
Normalmente, las conversaciones con mi terapeuta interior son mucho más largas que el siguiente ejemplo, pero aquí hay una muestra breve de como hago este ejercicio de escritura:
Terapeuta: ¿Cómo estás el día de hoy, Melissa? Melissa: Estoy bien. Solo me siento agotada, y estoy preocupada de que nunca voy a tener suficiente dinero. Terapeuta: Es entendible que te sientas agotada- has estado trabajando mucho, y últimamente no has dormido bien, ¿verdad? Melissa: Sí, es verdad. Terapeuta: Ojalá puedas dormir mejor esta noche. Anteriormente, ¿Que te ha ayudado a dormir mejor? Melissa: Hacer Yoga antes de dormir y acostarme antes de la media noche, ambos parece ayudarme mucho. Terapeuta: Sí, ¡definitivamente trata de acostarte antes de la media noche! Aún así parece tarde. ¿Antes de las 11pm es una hora razonable? Melissa: No, creo que no. Terapeuta: Está bien, es justo. Entonces empieza por acostarte antes de la media noche. ¿Crees que también puedes separar tiempo para hacer Yoga antes de acostarte? Melissa: Creo que si. Terapeuta: ¡Excelente! Dormir es muy importante, como ya sabes. Melissa: Yo sé Terapeuta: Muy bien, ahora ¡Qué pasa con tu preocupación por el dinero? Dices que te preocupa que nunca vas a ganar suficiente dinero, ¿Es esto correcto? Melissa: Sí Terapeuta: Dime más acerca de eso. Melissa: Es que es imposible para mi ganar más de lo que gano ahora, porque no puedo trabajar más hours de las que ya trabajo, y siento que ya no puedo costearme nada. Terapeuta: Ya veo. Bueno, casi todo mundo se estresa por dinero, no hay nada inusual en esto. Estoy de acuerdo de que tu ya estas trabajando tantas horas como puedes, pero eso no significa que es imposible para ti ganar más dinero. Puedes trabajar el mismo número de horas en otro empleo y ganar más dinero, ¿verdad? Melissa: Es verdad Terapeuta: También dices que sientes que ya no te puedes costear nada. ¿A que te refieres con eso? ¿Como que cosas desearías poder costearte? Melissa: Bueno, ¡Todo! Terapeuta: Yo no creo que eso sea verdad. ¿Hoy comprase comida, verdad? Melissa: Sí Terapeuta: ¿También traías dinero para pagar el transporte público? Melissa: Sí Terapeuta: Entonces, no es que no puedas costearte nada, verdad? Estas trabajando y ganando dinero, y eso te permite comprar las cosas que necesitas. Melissa: Sí, pero no es suficiente. Necesito cortarme el pelo y también necesito unas botas de invierno. Terapeuta: Ya veo. El salon de belleza al que vas es muy caro. ¿Has pensado en ir a uno menos caro? y también ¿Puedes conseguir botas de invierno de segunda mano? Melissa: Creo que esas dos son buenas ideas. También podría gastar menos en comida. Terapeuta: Te iba a sugerir eso. Creo que si gastas menos en comida, va a ser posible cortarte el pelo y conseguir las botas. Melissa: Debería haber pensado en eso. Terapeuta: Bueno, ¡Para eso estoy aquí!
Mi terapeuta interior es equivalente a mi intuición personificada
En estas conversaciones por escrito que tengo conmigo misma, soy capaz de enfrentar mi intuición dándole un nombre: mi terapeuta interior. Yo sé que hay sabiduría escondida en mi que está muy dentro, pero que también es difícil de escucharla con la estática de la ansiedad en mi mente y mi cuerpo. Afortunadamente, he descubierto que una conversación imaginaria con mi intuición vestida de terapeuta me permite desacelerar y darme el consejo y empatía que necesito.
A través de las altas y bajas de la vida, soy mis padres de familia, mi pareja y mi terapista. Yo sé que estas funciones que desempeño en mi imaginación son el Universo que me habla en tres voces diferentes, y estoy agradecida por la orientación que recibo de todas las fuentes afectuosas.
«LECTURA RELACIONADA» EL CHISTE ES SOBRE TI: Mira el lado divertido de tu crítico interior»
imagen 1 photosforyou de Pixabay 2 imágenes de Лариса Мозговая de Pixabay 3 photo by Callum Skelton en Unsplash
